Durante la ocupación alemana en Francia en la Segunda Guerra, el coronel de la SS Hans Landa (Christoph Waltz) estaba encargado de perseguir y eliminar la presencia judía de suelo francés. Los aliados, teniendo en cuenta que esta es una realidad alterna, no se quedan con las manos cruzadas y preparan a un contingente bajo las órdenes del teniente Aldo Raine (Brad Pitt) conocidos como los “Bastardos” para eliminar a la mayor cantidad de nazis. Uno de los judíos que escapó de Landa, Shosanna Dreyfus (Mélanie Laurent), adopta una nueva personalidad y se vuelve dueña de un cine. Así, conoce al héroe de guerra alemán Fredrick Zoller (Daniel Brühl), quien por su desempeño en el frente ruso, se volvió un icono del cine de propaganda nazi. Aprovechando esta situación, el alto comando nazi decide que la premiere de la película de Zoller se realice en el cine de Dreyfus. Ella, ve la oportunidad perfecta para vengarse de los nazis, tendiendo una trampa que acabe con los altos jefes nazis, incluyendo a Hitler. Al mismo tiempo, esta oportunidad también es aprovechada por los Bastardos. Sin embargo, su plan es descubierto por Landa, quien toma de prisionero a Raine. No obstante, Landa muestra su verdadero rostro y negocia con los aliados su rendición para evitar ser juzgado como un criminal. El desenlace de la película, es vertiginoso y explosivo. Un baño de sangre, fuego y balas que termina por resumir todo lo que fue la película.
Debido a su nominación a la Palme d'Or del festival de Cannes, así como al Oscar, mis expectativas a Inglourious Basterds (2009) de Quentin Tarantino eran muy altas. Demasiado supongo, y por ello he terminado tan decepcionado. Vamos por partes, de arranque entendía que no estaba entrando a una lectura histórica, sino a una reinterpretación, que se enfocó más hacia la parodia, el humor de la violencia copiosa y por ello, todos los personajes de la película terminan enfundados en un aire caricaturesco. Sin embargo, todo lo que podría proponer la película, en breve dos temas importantes, el discurso del cine y la revancha judía contra el nazismo, terminan difuminándose precisamente en este exceso visceral. Y no quiero decir que esto esté mal, pero termina minando toda la película, haciéndola endeble y con tramos insostenibles.
Uno de estos inconvenientes son los protagonistas de la película, sobre todo los Bastardos. Con ellos, no hay interés alguno de un desarrollo que brinde profundidad o al menos un tipo de característica que los haga destacarse del gran número de personajes de la película. Un amigo me decía que exageraba mi apreciación, y que Brad Pitt estaba únicamente como el comic relief del film. Y tiene razón. ¿Pero qué podemos decir de los otros personajes? ¿Cuál es el rol de Eli Roth? ¿Qué deja la actuación de Michael Fassbender? Como ellos, varios personajes entran y salen del film sin aportar nada. Y esto significa, escenas que terminan sobrando sin añadir a la historia central. Por supuesto, lo único que se aprovecha, es más tiempo para ametrallar y apuñalar nazis. Si la comparamos con Kill Bill, estas escenas de violencia no eran gratuitas, sino que permitían el crecimiento de la heroína. Pero en Bastardos, no existe este héroe.
Por ello no es sorpresa que el personaje que uno sí recuerde, es el de Hans Landa (Waltz). Él despierta una reacción tensa en el espectador. Por un lado, uno debe rechazarlo pues es un cazador y verdugo de hombres. Pero por otro lado, produce fascinación en la medida que es una relectura del prototipo nazi. Es un tipo educado, elegante, hasta por momentos afable. Y quizá su característica más resaltante, es que no es tan nazi. De cierta manera, está en el mismo nivel que Friedrich Herzog (Los Falsificadores) en tanto que no se cree el discurso del nazismo. Él está ahí cumpliendo un trabajo, pero en ningún momento ha sido idiotizado por la ideología. Esto sin lugar a dudas, al menos a mí, me genera empatía ya que uno puede trazar estos paralelos con esta época en la cual uno tampoco se termina de creer los discursos manteniendo una actitud cínica o de conveniencia.
Más allá de este personaje, pasando las balas, la sangre, una narrativa ligera, un vestuario excepcional y el intento de desarrollo de una reflexión desde la película, sobre el mismo cine y el poder que éste tiene en las masas (como propagada, como medio de construcción de verdades, etc.), Bastardos sin Gloria terminó muy por debajo de lo que yo esperaba.
Debido a su nominación a la Palme d'Or del festival de Cannes, así como al Oscar, mis expectativas a Inglourious Basterds (2009) de Quentin Tarantino eran muy altas. Demasiado supongo, y por ello he terminado tan decepcionado. Vamos por partes, de arranque entendía que no estaba entrando a una lectura histórica, sino a una reinterpretación, que se enfocó más hacia la parodia, el humor de la violencia copiosa y por ello, todos los personajes de la película terminan enfundados en un aire caricaturesco. Sin embargo, todo lo que podría proponer la película, en breve dos temas importantes, el discurso del cine y la revancha judía contra el nazismo, terminan difuminándose precisamente en este exceso visceral. Y no quiero decir que esto esté mal, pero termina minando toda la película, haciéndola endeble y con tramos insostenibles.
Uno de estos inconvenientes son los protagonistas de la película, sobre todo los Bastardos. Con ellos, no hay interés alguno de un desarrollo que brinde profundidad o al menos un tipo de característica que los haga destacarse del gran número de personajes de la película. Un amigo me decía que exageraba mi apreciación, y que Brad Pitt estaba únicamente como el comic relief del film. Y tiene razón. ¿Pero qué podemos decir de los otros personajes? ¿Cuál es el rol de Eli Roth? ¿Qué deja la actuación de Michael Fassbender? Como ellos, varios personajes entran y salen del film sin aportar nada. Y esto significa, escenas que terminan sobrando sin añadir a la historia central. Por supuesto, lo único que se aprovecha, es más tiempo para ametrallar y apuñalar nazis. Si la comparamos con Kill Bill, estas escenas de violencia no eran gratuitas, sino que permitían el crecimiento de la heroína. Pero en Bastardos, no existe este héroe.
Por ello no es sorpresa que el personaje que uno sí recuerde, es el de Hans Landa (Waltz). Él despierta una reacción tensa en el espectador. Por un lado, uno debe rechazarlo pues es un cazador y verdugo de hombres. Pero por otro lado, produce fascinación en la medida que es una relectura del prototipo nazi. Es un tipo educado, elegante, hasta por momentos afable. Y quizá su característica más resaltante, es que no es tan nazi. De cierta manera, está en el mismo nivel que Friedrich Herzog (Los Falsificadores) en tanto que no se cree el discurso del nazismo. Él está ahí cumpliendo un trabajo, pero en ningún momento ha sido idiotizado por la ideología. Esto sin lugar a dudas, al menos a mí, me genera empatía ya que uno puede trazar estos paralelos con esta época en la cual uno tampoco se termina de creer los discursos manteniendo una actitud cínica o de conveniencia.
Más allá de este personaje, pasando las balas, la sangre, una narrativa ligera, un vestuario excepcional y el intento de desarrollo de una reflexión desde la película, sobre el mismo cine y el poder que éste tiene en las masas (como propagada, como medio de construcción de verdades, etc.), Bastardos sin Gloria terminó muy por debajo de lo que yo esperaba.
Tags: Película Nazi Acción Guerra Comedia Inglourious Basterds Bastardos sin Gloria Quentin Tarantino Brad Pitt Mélanie Laurent Christoph Waltz Michael Fassbender Eli Roth Diane Kruger Daniel Brühl
ayyy por dios...que criticos de cine tan resentidos...que tratan de hallar un ciudadano kane en cada pelicula que miran...estamos hartos...
ResponderBorrarJaja gracias por tu comentario Julio, pero por suerte, no somos críticos de cine, simplemente fans comentando. Por otro lado, si revisas la lista de películas que se han comentado, encontrarás muchas super mainstream y otras desechables (como las Resident Evil) pues creemos que cualquier producto cultural puede decir algo sobre nosotros.
ResponderBorrarPor último, esta opinión de "Bastardos sin Gloria" es absolutamente mía y soy responsable de ella sustentándola con los argumentos que están en el post. Eso de ninguna manera trata de ser una Verdad, puede existir una opinión totalmente contraria (mientras esté basado en argumentos sólidos) con la que incluso podría coincidir en diversos puntos. Si a ti te gusta esta película, me gustaría leer el motivo.
Mil gracias por tu visita julio y sobre todo por no estar de acuerdo, pues solo en la discusión se puede encontrar un camino distinto.
Mi estimado compadre, vinimos de espectativas tan opuestas como decir que tu vienes de Ushuaia y yo de Ny-Alesund. Sin embargo lo interesante es que nuestras espectativas tan opuestas como las carreras de Ferenc Puschkas y JDO9, tuvieron el mismo punto de partida. Killbill me pareció tan infinitamente odiosa y ridícula, que hasta me hubiese dado cierto gusto y parecido lógico, que en el desenlace se revelara que el verdadero jefe de los lamentables 88 locos (o como se llamen) no era otro sino el mismisimo jarjar binks en persona. Eso me hubiese brindado el efecto "aaahhh, ya veo este director se está burlando de la industria cinematográfica, eso era, ahora lo entiendo, todo tiene un propósito...", el cual nunca llegó.
ResponderBorrarPara mi cada escena de acción de esta película de hecho no fue gratuita, sino que pagó el precio entero de la ridiculización de la heroina que ya solo faltaba que se subiera a su avión invisible y se pusiera su calzón azul. Demasiado comic para mi gusto. Pero te pido disculpas por desviarme de película.
A mi Basterds me pareció mucho mejor que las espectativas que me habia dejado killbill. La trama no tenía muchos niveles, es cierto, y los diálogos no son obras de arte compartidas entre guionistas y actores. Pero recordemos que es una película de tarantino. Por lo que sé, a los actores les encanta salir en sus películas, no por el renombre o porque este tipo los va a llevar un paso mas cerca de aquella estatuilla dorada por la que todos se arrancan los pelos, sino porque les divierte estar en sus peliculas. Este tipo es como aquel marihuanerito de la universidad con sus ideas proletarias y socialistas que siempre pasa con las justas, es un conchudo como no hay otro, pero igual todos los quieren por armar las mejores fiestas. Asi es como me lo imagino yo.
Las actuaciones en esta película del gran Christoph Waltz y de Brad Pitt a mi humilde criterio fueron soberbias. Waltz creo que no tengo ni por que dar mas razones. Pitt me recordó con su acento tejano al papel del gitano de Snatch, una de mis películas favoritas. El resto de actores son todos muy conocidos por acá, verlos haciendo un blockbuster gringo me causó cierto... no sé, algo parecido a lo que me sucedería por ejemplo si viese a magaly solier hacer una película con scorcese y leonardo di caprio. Y por último, una de las locations, la del bosque con los bunkers, queda muy cerca de mi universidad lo que despertó cierta nostalgia. A mi gusto las escenas si contribuyeron al desarrollo de los personajes, claro, no de todos por igual, pero decir que killbill es mejor, por poco y hace que se me caiga el pelo. Por último quiero mencionar el suspenso, preámbulo y hasta miedo que la película brinda en sendas escenas, empezando por la masacre de la familia judia, la escena de la masacre en el bar, o la infiltración de los basterds en la premiere de la pelicula al final. Para mi una película que mas bien reivindicó la duda y desazón que me dejó killbill.
Es curioso, Basterds me pareció mas cartoon o comic norteamericano que Kill Bill, más pegada a la estética anime donde la Novia no tenía nada que envidiarle a Jubei de Ninja Scroll. Basterds, en mi opinión era como recrearme en la epoca más inocente de Bugs Bunny y el Pato Lucas haciendo joda contra los Nazis (http://www.youtube.com/watch?v=jI9QzNVJK1s) o del primigenio Bucky y el Capitan America contra Adolf, donde el deseo gringo era de humillar y derrotar a los nazis. Era volcar en pantalla toda este deseo reprimido de venganza.
BorrarYo no he dicho que Basterds sea una mala película, sino que yo esperaba más de ella, tenía mucho potencial y un cast bastante bueno, pero no me da nada más que chongo. Las escenas de Pitt y Roth, tallandole la esvastica a sus enemigos son totalmente vacuas, es venganza pero plasmada muy burdamente y aqui quería darte la diferencia que yo sentí con Kill Bill.
Kill Bill viene no como parodia sino como una relectura a los explotations films setenteros, tipo Escupo en tu tumba, Death Wish (la primera de Charles Bronson), y especialmente Thriller (http://www.imdb.com/title/tt0072285), donde la venganza es la pulsión que mueve a los personajes. En la mayoría, causados por violaciones o asesinatos, se deshumanizan y vuelven máquinas asesinas, por ello la Novia no podía ser asesinada, y que no pueden ser parados hasta consumar la venganza. La idea que está detrás es justo qué es la pulsión sino un estertor de lo que queda de nuestra humanidad perdida, luego de cumplir la venganza, se exhala y termina de morir. Al menos así vi a Kill Bill y por ello sí me gustó y pongo en dos niveles completamente distintos cómo Tarantino toma este tema, y que en Basterds no me gustó cómo lo hizo.
Ese video de Looney Toons me dió verguenza ajena y una risa casi enfermiza al mismo tiempo. Luego de 12 anos de vivir acá, uno inevitablemente se siente que es parte de esta cultura pais, y admito que siento un carino muy especial por esta tierra. Jajaja pero el gavilán nazi es la fregada. Otra cosa que me gustó de los basterds es que por primera vez los alemanes no eran los krauts, salidos de una fabrica de producción en banda con la svastica tatuada en el brazo de nacimiento. Sino un grupo de gente entre los cuales tambien habian criticos y detractores de una ideologia tan absurda como primitiva (el papel de Till Schweiger y Gedeon Burckhardt) y que hasta activamente luchaban por una causa que obviamente era la correcta y mas humana de las dos. Por eso, aunque la escena que mencionas quizás si es algo o muy burda, la pelicula no dejó de gustarme mucho.
ResponderBorrarEl que yo vea cual de las dos es mas comic que otra quizás es porque le presto atención a otros aspectos que tu. Para mi hay en un lado un conjunto de soldados que le sacan la mugre a cuanto nazi encuentran, de mil maneras, pero todas ambientadas a la epoca muy bien. Y por el otro lado una tipa en un traje que le pelaron a bruce lee, que es capaz de pararse en la espada de un tipo mientras le rebana la yugular y pinta un cuarto del tamano de un coliseo enteramente con la sangre de 88 mafiosos que no son capaces de bajarse a una sola flaca.
Claro, viendolo desde un punto de vista mas lirico, los temas, el enfoque y el mensaje subliminal tu ves a basterds mas como comic, pero yo como un simple consumidor de entretenimiento quizás aun no tengo esa capacidad de ver mas allá de lo evidente...
PD: Me estoy enviciando con esto de discutir y argumentar sobre peliculas
Ya te dije que volantees el blog en tu mancha pues! Ahh y mira esa otra peli a la que hice referencia, Die Fälscher, es buenísima!
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